Mi autodestrucción artística continua


Hay días que me levanto y no quiero dibujar, ni escribir, ni pensar. Por el contrario hay días en los que me levanto con ganas de comerme el mundo,como si todo fuera posible y como si tan solo con el movimiento de mi mano pudiera crear todo aquello que quisiese. Mi mente se satura de ideas.

Corriendo intento alcanzar alguna libreta para poder plasmar lo más rápidamente posible esas ideas antes de que desaparezcan completamente de mi cerebro. Entonces es cuando comienza el éxtasis. Mis dedos de los pies se encogen y mi mente comienza a desvariar con los cientos de caminos que podría tomar con esa decisión. Con la pequeña decisión de hacer tal dibujo o de crear una empresa con mis amigos para vender nuestros diseños. Mis ideas van desde la cosa más insignificante hasta la más loca. A veces muchos de esos pensamientos finalmente se hacen realidad, como aquel sueño que tuve de aprender a tatuar (aunque aún esté en él) o esa idea  tan loca que tuve de viajar a escocia con menos de 150 euros.
Después del éxtasis llega la aceptación. Comienzo a leer artículos, ver vídeos sobre el tema, inspirarme en otros artistas... y me entra un profundo miedo.

Miedo al mundo exterior, a la grandísima competencia que hay en todo, a pensar que nadie va a comprar lo que hago (no sé quién podría querer un dibujo o quién podría pensar que lo que hago es bueno), miedo a no ser suficiente. Y me siento pequeña. El mundo comienza a hacerse grande y poco a poco me voy alejando y convirtiéndome en una pequeña hormiguita que se ve desde el firmamento. Un gran plano general, como diría mi profesor de fundamentos y yo en medio. Un punto en medio del plano, insignificante.

Ese es el momento en el que los sudores comienzan a aparecer, la cabeza me da vueltas y comienzo a sentirme totalmente desmotivada. Vuelvo a sentarme y mirar mis ideas amontonadas en una vieja hoja de libreta. Ojalá llegar a ser todo aquello que quiero.

Después del bajón, comienza la realidad.Veo que puedo tomar de esas ideas y hacerlo mío, lo anoto y empiezo a pintar, o a escribir este post, pero creo algo.
Se que llegará el día en el que crear, ya no será solo un hobbie.
(o eso quiero pensar)

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